El pasado domingo volví a las batallas, concretamente en Torrelavega para disputar otra prueba del open asturcantabro.
Fui a esta carrera con ganas de hacerlo bien, pero ya sin presión, ya que la general se me ha complicado mucho debido a los continuos problemas que estoy teniendo este año, unas veces problemas mecánicos, otras con los problemas de alergia, y otros por la sobrepresión que me he metido en la cabeza este año, me he obsesionado tanto en hacerlo bien, que al final casi todo me ha salido mal.
Pero bueno lo bueno de este deporte es, que no paras de aprender día, día por muchos años que lleves corriendo, siempre te quedan cosas por aprender, y parece que ya he aprendido a no obsesionarme mucho (que lo sigo haciendo pero ya menos jejeje)
Pues lo que decía, estaba súper motivado, las lluvias habían dejado el circuito muy “jodido” (siento los tacos pero tengo que mostrarme tal y como soy) pero a mí me gustaba porque era muy divertido.
Dan la salida, y no salgo muy bien, pero no me importaba mucho, pronto venia un repecho largo, en el que al final del mismo pasaba en el puesto 15 mas o menos.
Entramos ya en la zona critica, subidas con barro, bajadas con mas barro, pero yo me estaba encontrando como pez en el barro, y no paraba de pasar a gente bajando, y me estaba empezando a venir arriba, parecía que Pablyto había resurgido de sus cenizas, y en el primer paso por meta conseguía pasar 6º mas o menos, y lo que es mejor, cerca del podium.
Pero una vez mas, los buenos planes que tenía se me empezaron a torcer, mis frenos empezaron a fallar cuando mas los necesitaba, el barro me estaba comiendo las pastillas muy rápido, y me era muy difícil controlar la bici, en el segundo paso por meta ya había perdido unos puestos, ya me había caído 3 veces y estaba perdiendo tiempo.
Y en la tercera vuelta, ya los frenos solo formaban parte del decorado de la bici, porque ya no frenaban nada de nada, y en una de las bajadas me tuve que tirar de la bici, porque igual llegaba a la playa del Sardinero.
Entonces decidí retirarme, porque no merecía la pena jugármela, y tener una lesión a estas alturas de la temporada, pero bueno hay que sacar la parte positiva de todo esto, parece que vuelvo a ir bien, y el barro ya no me da miedo, así que espero que de aquí al 1 de agosto puedo hacer buenas carreras.
